50 mEl bizcocho es uno de los dulces más populares, más ricos y más prácticos para tener en casa, ya que nos soluciona de una forma deliciosa (sobre todo si es casero) desayunos, meriendas e incluso postres si lo acompañamos de helado, crema, fruta, nata… Hoy os vamos a enseñar a preparar un bizcocho en Thermomix sencillo y facilísimo, que os va a encantar y os sorprenderá por lo rápido de su elaboración. Y si no tenéis Thermomix, no os preocupéis, porque tenemos muchísimas más como por ejemplo este bizcocho de yogur o todos nuestros bizcochos de todo tipo que podréis preparar manualmente y que también están riquísimos. ¡Que los disfrutéis!
Ingredientes para Bizcocho en Thermomix para 4 personas 1 unidad
- 1 yogur natural o de limón (el vasito nos servirá para todas las demás medidas, ¡no lo tires!)
- 3 huevos Ralladura de limón o naranja
- 1 vaso (de yogur) de aceite de oliva suave
- 2 vasos (de yogur) de azúcar blanco
- 3 vasos (de yogur) de harina
- 1 sobre de levadura química
- Unas gotitas de extracto de vainilla
- Mantequilla (para untar el molde)
Cómo hacer la receta de Bizcocho en Thermomix
- Primero, precalentamos el horno a 180 grados, en la posición de arriba y abajo.
- Cogemos un molde para bizcocho (mejor si es rectangular, para que sea más cómodo cortarlo) y untamos todo su interior con mantequilla, para evitar que el bizcocho se pegue y podamos desmoldarlo fácilmente.
- En el vaso de la Thermomix, colocamos todos los ingredientes y los mezclamos durante 25 segundos a velocidad 5.
- Colocamos la masa del bizcocho en el molde untado con mantequilla, y lo horneamos durante 35 minutos a 180 grados. Es importante no abrir el horno durante la cocción, para evitar que baje. Una vez que veamos que ha subido y tiene un bonito tono dorado, lo sacamos del horno con cuidado y lo dejamos reposar.
- Desmoldamos cuidadosamente y servimos
Notas y Consejos
Aunque pocos aromas hay tan apetecibles como el de un bizcocho caliente y recién hecho, no os recomendamos consumirlo en caliente, por dos motivos: por un lado, porque resulta muy indigesto, y por otro, porque si intentáis desmoldarlo antes de que se enfríe, es muy probable que se os rompa. Si sois muy golosos, podéis ponerle un poco de azúcar por encima antes de meterlo en el horno: se hará una costra crujiente y dulce que queda riquísima.
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