30 mEstas espinacas gratinadas con bechamel quedan con una textura cremosa y un sabor suave delicioso. Las espinacas son muy pero que muy ligeras solo 23 calorías, así que aunque esta receta lleva bechamel no resulta muy calórica. Si buscas recetas de verduras apetitosas, ¡apunta esta en tu lista! En Cocina casera te la contamos paso a paso.
Nutrientes que aportan las espinacas
Estas verduras son famosas por su contenido en hierro, aunque esto es solo un mito. En realidad aportan sobre 3-3,5 mg de hierro pero un error de transcripción en el siglo XIX (de la secretaria del científico Erich Von Wolf, multiplicó por 10 el contenido en hierro salió transcrito 35 miligramos). Posteriormente se corrigió pero siguió en la mente de muchas personas mayores que la espinacas eran muy ricas en hierro. En lo que son realmente ricas es en calcio, tienen 117 miligramos, casi como la leche que tiene 125 mg por ración de 100 gramos.
Las espinacas también son campeonas en retinol o vitamina A, como ocurre con todas las verduras de hoja verde. Tienen 589 ug, y también antioxidantes que acompañan a esta vitamina como los betacarotenos, luteína y zeaxantina. La vitamina C es también un potente antioxidante, las espinacas tienen 40 miligramos. No es de extrañar que aunque hace siglos no se supieran todos estos nutrientes,el uso de las espinacas fuera recomendados por agrónomos como el árabe Ibn-al Awwam que nació en Sevilla en la segunda mitad del siglo XII.
Ingredientes para Espinacas gratinadas con bechamel para 4 personas
Para las espinacas
- Espinacas (que pueden ser congeladas) - 600 g )
- Queso rallado - 150 g
- Sal – una cucharadita
- Laurel – 1 hoja
Para la bechamel
- Maicena - 30 g o tres cucharadas soperas a ras
- Mantequilla-30 gramos
- Cebolla picada – 1 cucharada
- Leche – 225 ml
- Nuez moscada – una pizca
- Pimienta – una pizca
- Sal – al gusto
Cómo hacer la receta de Espinacas gratinadas con bechamel
- Primero preparamos la bechamel, para tenerla reposada. Pica la cebolla fina, no hace falta mucho solo una cucharada. Nos ayudará a restar sabor a la maicena. En una sartén añadimos la mantequilla y la cebolla, la doramos un par de minutos, luego agrega la harina y mezcla con la cuchara para que se vaya mezclando.
- Añade poco a poco la leche, de esta forma si te gusta más espesa la bechamel puedes agregar menos leche. Sigue removiendo, añade la nuez moscada, un poco de sal y pimienta. Cuando tengas la bechamel con la textura que te gusta apaga el fuego y deja reposar.
- Si usas espinacas frescas hay que lavarlas bien en un recipiente con agua y un poco de vinagre que sirve para desinfectar. Luego escurrir y cortar en trozos. Prepara un litro de agua y cuando hierva añade una cucharadita de sal y la hoja de laurel. Incorpora las acelgas cortadas al agua hirviendo, cocer durante 6 minutos, (las cocemos un poco menos ya que luego con el calor del horno terminará de hacerse).
- Una vez pasado el tiempo de cocción escurrir las espinacas, es importante que a la hora de gratinar no suelten agua. Si tus espinacas son congeladas, procedemos igual que con las frescas llena un cazo con agua y cuando hierva añade sal y laurel y cocer 6 minutos. Escurrir bien.
- Precalienta el horno a 180 grados, y coloca las espinacas en una fuente de horno. Verter la bechamel por encima.
- Introducir en el horno en la parte alta durante 20 minutos. Cuando lleven 10 minutos añadimos el queso y dejamos que siga el tiempo restante en el horno. Transcurridos 20 minutos apagar el fuego y dejar reposar en el interior del horno cinco minutos.
Notas y Consejos
Esta misma receta te sirve para otras verduras de hoja verde como las acelgas que también son muy saludables y ligeras. ¿Te ha gustado la receta? También te podría interesar otra de verduras como la de :
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