1 h y 10 m¡Hola Cocinacas! Si las fresas son una de tus frutas preferidas, esta receta de fresas maceradas en vinagre balsámico te va a encantar. Quizá te sorprenda encontrar un postre en el que se mezcla fruta con vinagre pero el resultado funciona a la perfección.
Es una de nuestras recetas de postres más originales y sorprendentes pero no la única. En la sección de postres encontrarás muchos otros con este fruto rojo, como la tradicional y riquísima tarta de nata y fresas o este bizcocho de chocolate con fresas, entre otros.
La fruta es la mejor forma y más sana de endulzar los platos. Además aportan su particular textura, aromas y sabores, y además existen muchas formas de utilizarlas para preparar con ellas recetas realmente sencillas.
El postre que vamos a preparar a continuación destaca por los contrastes de sabores y texturas que tiene. Por un lado, verás que las fresas se maceran con azúcar y vinagre, pero en el resultado final apenas se nota la acidez de este último ingrediente; mientras que por otro lado, vamos a mezclarlas con capas de queso y le daremos un toque de pimienta con el que conseguiremos que cada bocado sea una explosión de sabor y matices.
Por cierto, al final te contaremos un truco imprescindible relacionado con el vinagre, ya que existen varios tipos y te contaremos cuál es el mejor para este postre.
¡Esperamos que te guste nuestra receta de fresas maceradas!
Ingredientes para 4 personas
- Fresas - 450 gr.
- Vinagre balsámico - 45 ml.
- Queso mascarpone - 150 gr.
- Azúcar - 24 gr.
- Hojas de menta - 8 unidades
- Pimienta negra molida
Cómo hacer la receta de Fresas maceradas en vinagre balsámico
- Comenzamos limpiando las fresas con un paño húmedo en vez de aclararlas, para no dañarlas. Con un cuchillo, cortamos las hojas de la parte superior y retiramos el tallo con la punta. A continuación cortamos las fresas por la mitad, a lo largo, o en cuartos si son grandes y los vamos echando en un bol.
- Añadimos el azúcar, las tres cucharadas de vinagre balsámico y un poco de pimienta recién molida (si te gusta). Lo removemos bien para que se integren los tres ingredientes y tapamos el bol con papel film. Dejamos reposar en la nevera durante al menos una hora. Lo ideal es dejarlas macerar 3-4 horas.
- Justo antes de servir las fresas, añadimos hojitas de menta troceadas (al gusto). Vertemos una cucharada de mascarpone en cada uno de los vasitos o en boles individuales y vamos echando las fresas sobre el queso. Encima podemos poner un poco más de queso y espolvoreamos un poquito más de pimienta molida.
Notas y Consejos
Este postre de fresas balsámicas estará mucho más delicioso si se prepara con vingare de la mejor calidad. Lo ideal es utilizar vinagre balsámico que haya envejecido lentamente y que haya adquirido una consistencia espesa, de jarabe.
El auténtico vinagre balsámico procede de Módena, Italia y se deja envejecer como el vino. El envejecimiento hace que su textura se vuela más espesa y el sabor se concentre. Los balsámicos más jóvenes son buenos para aliñar ensaladas pero para postres como este, es preferible buscar un buen vinagre envejecido.
Además, para esta receta puedes utilizar azúcar blanco, moreno o si lo prefieres, prescindir de ella, pues no es un ingrediente esencial.
En cuanto a la pimienta, si no te gusta, puedes sustituirla por granos de pimienta rosa (esta pica muy poco y aromatiza mucho), u optar por mezclar las fresas con un poquito de canela, jengibre en polvo o extracto de vainilla.
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Y si te ha gustado la mezcla de fresas y vinagre, te recomendamos que pruebes también esta receta de gazpacho de fresas o los espárragos blancos con vinagreta de fresas. ¡Te encantarán!
¡Hasta la próxima Cocinacas!
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