¡Hola Cocinacas! ¿Te gusta la comida asiática? Si es así, seguro que los fideos es uno de los primeros platos que te vienen a la cabeza. Combinan a la perfección con otros ingredientes, y aunque ya estarás acostumbrado a comerlos, seguro que no siempre te resulta fácil diferenciarlos. Por eso hoy queremos hablarte sobre los principales tipos de fideos asiáticos que existen, para que sepas reconocerlos en cada plato e incluso cocinarlos en casa, porque te enseñaremos algunas recetas.
La dieta oriental o asiática es una de las más recomendadas por nutricionistas. Destaca por sus ventajas nutricionales y por sus platos bajos en grasas. Aunque esta abarca muchos tipos de cocinas y cada una tiene sus especialidades, uno de los alimentos más empleados son las verduras, estas cobran un gran protagonismo en los platos. También utilizan mucho pescado en sus preparaciones, aunque los diferentes tipos de sushi son los que han logrado cosechar el mayor éxito en todo el mundo.
Por su parte, los fideos asiáticos son la base de innumerables platos desde hace siglos, tanto por sus propiedades nutritivas y versatilidad, como por la variedad de colores, tamaños e ingredientes con los que están elaborados. Los principales tipos de fideos asiáticos son los que están hechos con arroz y los que tienen como base trigo y huevo. Sin embargo, también lo hay de té verde, almidón de judía, calabacín o quinoa.
Para poder reconocer más fácilmente cuáles son los principales tipos de fideos asiáticos, hemos decidio agruparlos en dos categorías: según su elaboración y según su procedencia (fideos chinos, japoneses, tailandeses…). De esta forma también podremos enseñarte la receta de alguno de ellos, por si quieres comprar tú mismo los fideos y transportarte al continente asiático a través de los sabores.
Fideos asiáticos según su elaboración
Fideos de arroz
El arroz es un cereal considerado como alimento básico en la gastronomía de muchas culturas, en especial la asiática. De hecho, es el segundo cereal más producido en el mundo, por detrás del trigo.
Los fideos de arroz en la cocina asiática están hechos de harina fina de arroz y agua. Son aptos para celíacos. Existen muchas variedades de diferente longitud y grosor. Sin embargo, son fácilmente reconocidos porque tienen un color blanco lechoso, ligeramente translúcido, y forma aplanada. Siempre se venden secos y al hervirlos se regeneran.
Son fuente de vitamina B, fósforo y potasio, y ayudan a equilibrar la tensión arterial.
Son un ingrediente básico en China, Tailandia, Filipinas, Vietnam. Se emplean sobre todo para elaborar ensaladas pero también pueden comerse en sopas, guisos y salteados (tipo wok), ya que absorben muy bien los líquidos y adquieren una textura tierna y resbaladiza.
Fideos de huevo
Elaborados con harina de trigo y de huevo, son los más típicos dentro de la comida asiática. Son similares a la pasta italiana y su calidad, suele depender del tanto por ciento de huevo que contengan. Se pueden encontrar tanto secos como frescos.
Se consumen en sopas o pre-cocidos, también salteados en el wok con diferentes tipos de carnes y verduras con salsas. Otra opción es servirlos fríos en ensaladas.
Son muy populares en China, Japón y el Sudeste Asiático.
Fideos de té verde
Son elaborados a partir de harina de trigo y harina de trigo sarraceno o, solamente, con harina de trigo sarraceno (también llamada alforfón) y también se les añade polvo de matcha.
No son fideos que se coman habitualmente, solo en ocasiones especiales.
Fideos celofán
Se elaboran a base de harina de soja verde. Este tipo de soja también es conocido como garbanzo verde chino, frijol o judía mungo. Aunque se llame soja, la soja verde es totalmente diferente de la soja más conocida en Occidente. Solo tiene en común su alto contenido en proteínas.
Los fideos celofán son blancos, al hervirlos se vuelven transparentes y también son muy delgados. Cuando se sumergen en aceite caliente para blanquearlos se multiplica su tamaño y luego quedan muy crujientes.
Se utilizan en sopas o para adornar otros platos. Estos se ponen como base o se hacen nidos de fideos salteados con carnes, crustáceos y vegetales. Es la base del popular plato chino, hormigas subiendo un árbol.
Fideos de konjac
El konjac o boniato elefante, conocida también como lengua del diablo, es un tubérculo de origen asiático, del clima tropical de Japón, China, Corea, Indonesia y Taiwan.
Su raíz es 100% fibra con una gran capacidad de absorción de agua. Debido a ello, la fibra de konjac es muy utilizada en productos de dietética para las dietas de adelgazamiento y para la producción de pasta. Por sus propiedades saciantes, regula los niveles de azúcar en sangre y protege la flora intestinal.
Con el konjac se elaboran los fideos Shirataki, que son de un color gris, gelatinosos y translúcidos y, sobretodo, muy finos. Pueden encontrarse secos o frescos.
Fideos japoneses
Fideos Ramen
Son conocidos en todo el mundo, aunque su origen es chino. Se elaboran con harina de trigo y se encuentran secos y frescos. Son elásticos, de color amarillento y tienen un grosor de alrededor de un milímetro
Lo habitual es mezclarlos con caldos de aves, carnes o pescado. También en sopas de verduras, marisco o carnes como en platos secos en los que la pasta se cuece y luego se saltea y se mezcla con otros ingredientes.
A menudo se denomina ramen también al plato hecho con este tipo de pasta.
Fideos Udon
Son los fideos más gruesos de la gastronomía asiática (2 o 3 milímetros). Están elaborados con harina de trigo.
Pueden pueden ser cuadrados, planos o redondos y se venden en formato seco o fresco, en pequeños paquetes. Además, pueden servirse calientes, como en una sopa vegetariana de tofu por ejemplo, o fríos. Cuando se cuecen son blancos y tiernos.
Fideos Soba
Se reconocen porque son fideos de color oscuro porque son elaborados a partir de harina de trigo y harina de trigo sarraceno. También pueden ser solo de harina de trigo sarraceno, conocida como alforfón. De ahí que a estos fideos también se les conozca con el nombre de fideos de alforfón.
Este tipo de harina es rica en Vitamina B, aminoácidos y en hidratos de carbono. Se venden normalmente secos y se sirven en sopas, tanto calientes como frías, o salteados en platos como este plato de fideos soba con pollo y verduras. También puedes preparar con ellos una nutritiva ensalada de fideos de alforfón con tofu.
Fideos Yakisoba
En español serían lo que nosotros llamamos tallarines fritos. Aunque la palabra soba está integrada en el término yakisoba, estos fideo asiáticos no se elaboran con harina de trigo sarraceno, sino con harina de trigo.
Se cocinan con carne de vaca, pollo o cerdo y se condimentan con col, cebollas y verduras.
Fideos Somen
Se reconocen fácilmente porque son blancos, muy largos y muy finos. Se parecen a los soba pero son mucho más delicados. Están hechos con harina de trigo, agua y también con un poco de aceite.
Se comen habitualmente encima de una base de hielo que los mantiene fríos y mojados en una salsa llamada tsuyu. Si hace frío se sirven con un caldo caliente llamado numen.
Fideos Hiyamugi
Tiene un grosor intermedio entre los fideos udon y los fideos somen, con un diámetro de entre 1.3 y 1.7 milímetros.
Se comen fríos y están elaborados con trigo. En verano se aderezan con un caldo picante.
Harusame
Significa lluvia de primavera en japonés y así designan a estos fideos de cristal de fécula de patata o boniato. Miden de 12 a 18 cm y son delgados y transparentes.
Se utilizan en ensaladas, en el famoso nabemono (guiso típico japonés), en rollitos de primavera, en los platos de sushi y en algunas sopas. Tampoco tienen gluten.
Fideos chinos
Ho Fun
Hechos con harina de arroz, son muy anchos (pueden llegar al centímetro) y bastante gruesos.
Se suelen servir salteados, como es el caso de la ternera chow fun.
Mei Fun
Hechos también a base de harina de arroz, se diferencian de los fideos Hon Fun porque el Mei Fun es un fideo fino.
En nuestras recetas de comida china encontrarás suculentos platos como estos fideos chinos con verduras o los fideos chinos con pollo con pollo y almendras. Y también otros platos chinos como este chow mein cuyos fideos hay que sofreirlos para darles una textura crujiente, o el popular lo mein.
Fideos coreanos
Los fideos Naeng myun o naeng-myeon son típicos de Corea del Norte y están hechos con harina de trigo sarraceno (alforfón) y fécula de patata. Son muy parecidos a los soba pero de color marrón más intenso.
Suelen consumirlos fríos, pero a veces también se consumen en sopas, fría o caliente, con caldo de ternera.
Fideos tailandeses
En Tailandia, los fideos asiáticos más consumidos son los tallarines. Es la denominación genérica que se refiere a la forma, de perfil aplanado. En concreto destacan los que están hecho con harina de trigo y los de arroz. Estos últimos son muy versátiles y usados en sopas pero sobre todo en salteados. No requieren cocción, bastando unos minutos de remojo antes de saltearlos.
El pad thai o wok tailandés es el plato con fideos más conocido.
Fideos filipinos
Los fideos Pancit luglug son de origen filipino aunque introducidos por los chinos. Se hacen a partir de fécula de maíz y antes de cocinarlos se recomienda frotarlos con agua caliente.
También llaman pancit a los fideos o platos de, que venden por todo el país en las denominadas panciterias.
Otro tipo de fideos asiáticos
Los tokoroken son fideos asiáticos que tienen su origen en Japón y están elaborados con gelatina vegetal, obtenida hirviendo el agar agar. Esta se pasa por una prensa de canaleta que tiene un final en forma de malla de pequeños cuadrados (o planos) que les da la forma.
Tienen un contenido calórico muy bajo y alto contenido en fibra. Se consumen fríos en ensaladas, o con caldos y vegetales.
En su versión china, son conocidos como fideos de gelatina chinos.
¿Conocías todods estos tipos de fideos asiáticos? Cuéntanos a través de los comentarios cuáles son los que más te gustan y la receta que te animarás a cocinar en casa. Aprovecha para viajar a través de los sabores.
Como puedes ver existen muchos tipos de fideos, así que si consideras que nos falta alguno, no dudes en comentarlo también para que podamos completar la lista entre todos.
¡Hasta la próxima Cocinacas!
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